Refinar

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        En esta era de la globalización, en donde los niños son bombardeados por todos lados de información a una edad cada vez más temprana, es importante guiarlos y acompañarlos en su proceso de crecimiento y auto-conocimiento (ANUIES, 2000).  

 

      Las escuelas fungen como un pilar en este desarrollo de los menores. Por ende, es necesario implementar programas de tutoría a partir de los 6 años de edad. Es aquí, en la educación básica donde podemos detectar a tiempo a los alumnos que tengan necesidades especiales en: aprendizaje, sociales, emocionales, psicológicos, familiares, o personales (Zavala, 2003).

 

            Al poder detectar a tiempo, cualquier necesidad de estos alumnos. Por ende, Delors establece que “ la educación debe contribuir al desarrollo global de cada persona” (1996). Este desarrollo debe acompañar al sujeto por toda la vida y ante los rápidos cambios que permanentemente se observan y que posibilitan, entre otras cosas, diferentes opciones de aprendizaje, que exigen una educación durante toda su vida: una educación permanente.


Los objetivos generales se pueden ver claramente desarrollados durante en esta propuesta. Principalmente, se plantean las funciones del tutor y las responsabilidades que a él, le acontecen. Además, se limitó lo que es y lo que no es, esto eliminando confunsión sobre el puesto del tutor. Y las responsabilidades que le corresponden, así como sus limitaciones bien establecidas. En los Anexos, se encuentran los cuestionarios, evaluaciones, formatos de guías de entrevistas, que ayudarán como herramientas para recabar la información sobre los estudiantes que es vital para el tutor.

 

La Propuesta Educativa cumple con el objetivo general al desarrollar un Manual de un Programa de Tutoría a Nivel Básico. Con esto será posible implementarlo en varias escuelas e instituciones, que han desean hacer un verdadero cambio educativo, beneficiando principalmente a nuestros alumnos en una edad temprana.  

 

            Nuestros logros serán alumnos bien preparados para solucionar problemas dentro y fuera del aula, con confianza, autoestima, habilidades, actitudes, buenas notas académicas, técnicas de búsqueda, con capacidad de reflexionar y actuar. Además listos para pasar a sus nuevas etapas como la preparatoria, universidad y al mundo laboral (OCDE, 1997).

Referencias: 

ANUIES (2000). La educación superior en el Siglo XXI. Líneas estratégicas de desarrollo. Recuperado dewww.anuies.mx/servicios/d_estrategicos/documentos_estrategicos/21/sXXI.pdf

Delors, Jacques (1996). La educación encierra un tesoro. Informe a la UNESCO de la Comisión Internacional sobre la Educación para el siglo XXI. México, Editorial UNESCO.

OCDE (1997). Examen de la Política Educativa de México, Informe de los examinadores. México: Editorial: Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico.

Zavala, C. (2003) Guía práctica para la tutoría grupal. Editorial UAA. México.

Comentarios

  1. Concuerdo contigo, es importante recordarnos que los docentes somos también personajes que debemos guiar a los estudiantes para el futuro pero un futuro donde cada una de sus habilidades sean desarrolladas para todas las áreas de su vida .

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